A pesar de las mejoras que introducirá la ley, esta no plantea una solución definitiva a los desahucios sin alternativa habitacional
Tras casi 3 años de negociaciones y bloqueos, hoy se ha anunciado finalmente un acuerdo para aprobar la Ley Estatal de Vivienda, la primera de nuestra democracia. A falta de conocer con exactitud el redactado final de la Ley, lo conocido en las distintas ruedas de prensa convocadas por los grupos parlamentarios no resulta del todo halagüeño en cuanto a la protección real del derecho a la vivienda se refiere. A pesar eso, se aprecian algunos cambios positivos respecto al Anteproyecto de Ley.
En una primera valoración tentativa, creemos que finalmente no se han articulado mecanismos para acabar, de forma permanente, con los desahucios sin alternativa habitacional. En cuanto a la regulación de los precios de alquiler, consideramos que siguen existiendo algunas lagunas que ponen en duda la bajada efectiva de los precios en el conjunto del territorio español, si bien las modificaciones introducidas suponen un cambio positivo respecto a la práctica ausencia de regulación que imperaba hasta el momento.
Por último, cabe destacar también la falta de un plan ambicioso y concreto para constituir un parque público de viviendas suficiente, lamentando especialmente la ausencia de medidas encaminadas a recuperar las viviendas en manos de la SAREB.
Así, a la espera de conocer la letra pequeña del acuerdo y realizar una valoración más detallada, desde el sindicato seguiremos trabajando y luchando en todos los espacios posibles para que el derecho a una vivienda digna, asequible y adecuada sea una realidad para toda la ciudadanía.