UGT considera fundamental reforzar los esfuerzos para completar la pasada reforma del mercado laboral, de manera que siga aumentando la calidad y cantidad del empleo
Los datos de la primera EPA del año 2025 publicados hoy registran una caída trimestral del empleo de 92.500 personas ocupadas, que se debe a la estacionalidad propia de este período del año, en el que se pierde gran parte del empleo creado para la campaña navideña. No obstante, descontando los efectos estacionales y de calendario, el empleo ha crecido un 0,7%. Por otro lado, el número de personas desempleadas ha registrado un aumento de 193.700 personas por el mismo motivo, si bien, sin tener en cuenta esa estacionalidad, ha caído también un 0,7%. La tasa de paro se ha incrementado en ocho décimas, hasta el 11,4%.
En términos anuales, el número de ocupados aumenta en 515.400 (un 2,4% más) y el de personas desempleadas se reduce en 188.700 (un 6,3% menos).
Por tanto, pese a tratarse del peor trimestre del año por las mencionadas razones estacionales, el comportamiento del empleo en esta ocasión puede considerarse positivo, en línea con la evolución del mercado laboral en los últimos años. Sin embargo, la reciente guerra arancelaria abierta por el Gobierno de los Estados Unidos ha generado incertidumbre en los mercados y puede afectar al comercio internacional, lo que tendría unos efectos perniciosos en la economía mundial y, probablemente, en la española. Por lo tanto, será muy relevante evaluar los datos del siguiente trimestre teniendo ya en cuenta el cambio de orientación que ha habido en la evolución económica.
La información conocida hoy refleja datos que avalan el buen momento de nuestro mercado laboral. Entre ellos, la fortaleza de la creación de empleo, que mantiene un sólido ritmo de crecimiento anual del 2,4%, y la mejora en la calidad del empleo, que sigue siendo una realidad y que se puede apreciar en el aumento del número de personas con contrato indefinido, 476.000 más que en el mismo trimestre del 2024, y en la reducción de la tasa de temporalidad, que se sitúa en el 15,1%, 4 décimas inferior a la registrada en el último trimestre de 2024 y 10,5 puntos menos que en el cuarto trimestre de 2021, antes de que entrara en vigor la última reforma laboral.
Sin embargo, el mercado de trabajo continúa arrastrando problemas estructurales que requieren de soluciones. La economía española registra todavía una elevada tasa de paro, que, pese a que se haya reducido drásticamente en los últimos años, todavía permanece en el 11,4%. Además, persiste un alto paro de larga duración (38,2%), lo que implica que casi 4 de cada 10 personas desempleadas llevan más de un año buscando empleo. Por otro lado, la parcialidad involuntaria sigue siendo muy elevada (46,1%), y constituye una de las principales causas de la pobreza laboral.
Para abordar de manera efectiva estos problemas estructurales del mercado laboral es esencial reformar las políticas activas de empleo y aumentar tanto los recursos económicos como humanos del SEPE. Solo así será posible ofrecer una orientación laboral personalizada que potencie la empleabilidad de las personas desempleadas y desarrollar una intermediación laboral real, capaz de influir positivamente en la creación de empleo.
Por otro lado, ante el fallo del Comité Europeo de Derechos Sociales que declara el coste del despido insuficientemente disuasorio, es fundamental reformar el despido en España para que se ajuste a la Carta Social Europea Revisada de modo que se mejore la protección de las personas trabajadoras. Un coste de despido disuasorio y reparador es imprescindible para mejorar el funcionamiento del mercado laboral y reforzar los derechos de las personas trabajadoras.
En definitiva, con motivo de la celebración del 1º de mayo es fundamental reforzar los esfuerzos para completar la pasada reforma del mercado laboral, de manera que siga aumentando la calidad y cantidad del empleo, protegiendo a las personas trabajadoras con un coste del despido efectivamente disuasorio y reparatorio y mejorando las políticas activas de empleo.
Paralelamente, es crucial lograr subidas salariales en la negociación colectiva que amplíen la capacidad adquisitiva de las personas trabajadoras. Por último, debe implementarse ya la reducción legal de la jornada de trabajo, con la perspectiva a medio plazo de alcanzar las 32 horas semanales. Todo ello permitirá construir un modelo productivo más avanzado, sostenible y resiliente para poder enfrentar los desafíos exógenos que se ciernen sobre nuestra economía.
Datos de interés
Según la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de 2025 publicada por el INE hubo un descenso de la ocupación respecto al trimestre anterior, 92.500 personas ocupadas menos, con lo que se alcanza un total de 21.765.400 personas empleadas. Este dato es un 2,4% superior al del primer trimestre de 2024, resultando en 515.400 personas empleadas más respecto a hace un año. La creación de empleo por sectores económicos en términos trimestrales registra un descenso en todos los sectores económicos menos en la agricultura, donde aumenta en 25.000 personas ocupadas más. Por lo tanto, disminuye el número de ocupados en el sector servicios (-112.300), la industria (-4.400) y en la construcción (-700).
El número de personas desempleadas ha aumentado en 193.700 respecto al trimestre anterior. Como consecuencia, hay un total de 2.789.200 personas paradas, el mejor dato en un primer trimestre desde 2008. En lo que respecta a la tasa de paro, esta tasa ha aumentado 8 décimas, situándose en un 11,4%. Respecto a hace un año esta tasa ha descendido 9 décimas. Por su parte, el porcentaje de parados de larga duración, es decir, las personas que llevan en búsqueda de empleo más de un año, ha disminuido en este trimestre hasta el 38,2% del total, 4 décimas menos que el trimestre anterior. En total, se contabilizan 1.065.400 de personas desempleadas en estas circunstancias.
En cuanto a la población asalariada, la reducción es de 90.000 personas, alcanzando un total de 18.499.200. Esta caída se produce tanto entre quienes tienen un contrato indefinido (-9.800), como, sobre todo, en las personas con contrato temporal (-80.200). Con ello, la tasa de temporalidad mejora cuatro décimas respecto al último trimestre de 2024, situándose en un 15,1%, la más baja desde el año 1987 cuando comienza la serie del INE.
En total hay 15.702.700 personas con contrato indefinido, 475.900 más que hace un año, a la vez que las personas con contrato temporal se han reducido en 40.600 en los últimos doce meses.
Distinguiendo por tipo de jornada, el empleo a tiempo completo ha descendido en 109.400 personas este trimestre, mientras que aumenta el empleo parcial subió en 16.900 personas. Por otro lado, la parcialidad involuntaria se incrementó hasta el 46,1%, una cifra muy elevada. Esto supone que prácticamente la mitad de las personas trabajadoras a tiempo parcial lo son únicamente por no encontrar trabajo a jornada completa. Respecto a hace un año, hay 417.100 personas más asalariadas con contrato indefinido y a tiempo completo.
Finalmente, el número de hogares con todos sus miembros activos en paro ha aumentado en 49.500 durante este trimestre. Son ya 882.900 hogares en total los que se encuentran en estas circunstancias, por lo que es crucial impulsar la creación de empleo de calidad para mitigar este problema tan extendido.
La EPA, en datos
- En el primer trimestre de 2025 el desempleo ha disminuido en 193.700 personas, registrando un total de 2.789.200 personas desempleadas. Por su parte, la tasa de paro se sitúa en el 11,4%, 8 décimas superior a la del cuarto trimestre de 2024 y 9 décimas menor que la del mismo trimestre de 2024. En términos anuales, el número de personas en paro ha caído en 188.700, es decir, un 6,3% menos.
- La tasa de paro de los hombres en este trimestre es de un 10,1%, mientras que la de las mujeres es del 12,7%. Por otro lado, la brecha de empleo entre hombres y mujeres sigue siendo elevada y, de hecho, disminuye ligeramente respecto a la registrada el trimestre anterior: el 46,6% de las personas ocupadas son mujeres, mientras su peso en el desempleo es del 53% y en la inactividad del 57%.
- La tasa de paro entre los menores de 25 años aumenta hasta el 26,5% mientras que entre los mayores de 55 años lo hace hasta el 10,4%.
- El número de personas desempleadas entre las personas extranjeras ascendió en el trimestre en 45.800 personas, de manera que su tasa de paro aumenta al 16,5%.
- El número total de ocupados es de 21.765.400 personas, 92.500 personas menos que el trimestre anterior. Distinguiendo por sexo, disminuye la ocupación masculina (en 94.100 hombres menos) y se incrementa la femenina (1.600 mujeres más) en este trimestre.
- El número de personas ocupadas se ha incrementado en términos anuales en 515.400 personas (un 2,4%); encadenando así diecisiete trimestres consecutivos de incrementos anuales.
- No obstante, en este trimestre han disminuido el número de horas trabajadas (0,2% menos). Por su parte, en términos anuales, las horas trabajadas totales son en este primer trimestre del año un 2,6% superiores a las del mismo trimestre de 2024.
- Por sectores, el número de ocupados durante el primer trimestre del 2025 se incrementa en la agricultura (3,4%). No obstante, se reduce en el resto de sectores; en los servicios (0,7%), la industria (0,2%) y en la construcción (menos de una décima). En términos absolutos, los ocupados se reducen en el sector servicios en 112.300 personas menos, en la industria 4.400 menos y en la construcción en 700 menos. Por su parte, en la agricultura hay 25.000 personas empleadas más.
- Por su parte, la parcialidad se sitúa en este trimestre en un 14,1% (23,3% para las mujeres), mientras que la parcialidad involuntaria aumenta 1,5 puntos (hasta el 46,1%), un dato que permanece en unos valores muy elevados, puesto que afecta a 1.418.600 personas ocupadas.
- El número de asalariados temporales se reduce en 80.200 asalariados durante este trimestre, mientras que los indefinidos lo hacen en 9.800; lo que implica que la tasa de temporalidad se reduzca hasta el 15,1%.
- El porcentaje de personas en desempleo de larga duración, es decir, que lleva más de un año buscando empleo se ha reducido en 0,4 puntos, hasta el 38,2% de las personas desempleadas. Por su parte, las personas que llevan buscando empleo más de uno y menos de dos años ahora representan un 14,7% del total de personas desempleadas, 2 décimas más que antes.
- Por último, el número de hogares que tienen a todos sus miembros activos en paro se incrementó en 49.500 en este trimestre, registrándose un total de 882.900 en este trimestre.