La Federación recuerda al Gobierno que la industria automovilística es un sector estratégico que requiere de medidas también estratégicas en un contexto de diálogo y confianza entre las partes

“La industria del automóvil se enfrenta en nuestro país a una tormenta perfecta”, afirma el secretario del Sector Automovilístico de la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT, Jordi Carmona, para quien, “la crisis actual que vive el sector, unida a la política errática del Gobierno, que sigue sin considerar a la industria automovilística como un verdadero sector estratégico, están contribuyendo a que se combinen los elementos precisos para desencadenar una tormenta perfecta que amenaza con dar al traste con la incipiente recuperación de una industria vital para nuestra economía”.

Hay que recordar que el sector se enfrenta a una serie de dificultades específicas como consecuencia de su rápida transformación (robotización, cambio conceptual de la movilidad, digitalización, vehículo verde, industria 4.0, vehículos con menos piezas, reciclaje de las plantillas, etc.), dificultades que se han unido a las consecuencias de la pandemia, a la mala planificación de las multinacionales en su política de deslocalización (que ha dejado en manos de China y Taiwán la producción del 80% de los microchips), a la fluctuación del precio del petróleo y sus derivados, al encarecimiento de la materia prima, y a las restricciones en materia medio ambiental en el conjunto de Europa y particularmente en España.

“Si a todos estos inconvenientes le añadimos, por un lado, la ausencia de un verdadero diálogo entre los agentes sociales y el Gobierno, que está retrasando la adopción de medidas consensuadas de calado, y por otro, el anuncio de medidas unilaterales por parte del Ejecutivo que no facilitan la compra de vehículos a los potenciales consumidores, entonces nos encontramos ante una combinación de factores que, unidos, pueden abocar a la industria del auto a una crisis de enorme calado de consecuencias imprevisibles”.

De hecho, hay medidas de carácter transversal, como prolongar la edad de jubilación y penalizar la prejubilación, que requieren del mayor consenso posible entre las partes porque afectan a todos los sectores económicos y, en este caso, muy directamente al sector del automóvil. Es más, de aprobarse la reforma de las pensiones en los términos anunciados, “va a dificultar sobremanera la aplicación del contrato de relevo y, en consecuencia, también el rejuvenecimiento de las plantillas, que es sinónimo de continuidad en el empleo industrial de calidad y con derechos”.

Desde UGT FICA venimos reclamando desde hace tiempo una transición ordenada para el sector que cuente con todos sus actores y no deje a nadie atrás, y este es el camino que vamos de defender porque nos jugamos nada más y nada menos que salvaguardar la industria del automóvil y a sus más de dos millones de trabajadores y trabajadoras.

El secretario del Sector Automovilístico de UGT FICA apuesta por “una transición ordenada en un sector tan expuesto a los cambios externos como el del automóvil”, que requiere de “medidas consensuadas que encaminen el proceso de transformación hacia una industria ecológica y respetuosa con el medio ambiente, pero con futuro”.

“No podemos esperar más, el Gobierno tiene que dar los pasos ya”, insiste Carmona. Desde UGT FICA reclamamos en su día una mesa de diálogo para poder debatir y negociar medidas que supusieran avances para el automóvil y su industria auxiliar, y el Gobierno constituyó la Mesa de Automoción y varios grupos de trabajo, pero desde entonces no ha habido avances. “De hecho, no ha habido ni reuniones. Ahí están las 23 propuestas presentadas por UGT FICA para contribuir a la recuperación del sector e impulsar la industria automovilística más allá de su necesaria transformación, ordenada y justa”.

“Y mientras tanto, el tiempo corre en contra del sector”, lamenta Jordi Carmona. “Necesitamos abordar cuanto antes un diálogo sectorial que rompa la tormenta perfecta que amenaza al sector y apueste por un plan industrial global que reúna todas las propuestas dirigidas a consolidarlo de cara al futuro sin perder de vista la perspectiva del empleo y la industria”.