Más de un millón de personas trabajadoras del sector se van a ver beneficiadas por los avances de un convenio fruto del diálogo social y con vigencia hasta 2026

La Federación de Industria, Construcción y Agro ha firmado hoy el VII Convenio General de la Construcción, ”un acuerdo histórico que sitúa al sector en la senda del siglo XXI”, en palabras del secretario general de UGT FICA, Mariano Hoya, que además, “supone el cierre de un ciclo que se inició con el primer convenio general cuando hicimos una apuesta por mejorar la formación y la seguridad de los/as trabajadores/as del sector a través de la constitución de la Fundación Laboral de la Construcción”.

Se trata, además, de un convenio fruto de un diálogo social que constituye el ADN de las relaciones laborales en la construcción, y que va a beneficiar a más de un millón de personas trabajadoras a lo largo de todo el periodo de vigencia del convenio, entre 2022 y 2026.

Entre los grandes logros de este VII Convenio, UGT FICA destaca la inclusión del Plan de Pensiones de Empleo Simplificado para las y los trabajadores de la construcción, lo que supone un hito extraordinario al tratarse del primer plan de estas características que se firma en España para todo un sector de la economía. El Plan empezará su andadura en este año 2023, con aportaciones empresariales desde 2022, y va a continuar con incrementos y mejoras en los próximos años, sirviendo de complemento al sistema público de pensiones cuando el trabajador o la trabajadora alcance la edad de jubilación.

Con relación al incremento salarial, el nuevo convenio establece una subida del 10% para los tres años, tal y como se pactó en el preacuerdo firmado en mayo de 2022, es decir, un 4% para el 2022, el 3% para el 2023 y otro 3% para el 2024, además de recuperar la cláusula de garantía salarial. A estos incrementos, hay que añadir la repercusión económica que tendrá el plan de pensiones cuando esté plenamente vigente para el conjunto del sector.

La lucha contra la temporalidad y la precariedad también ocupa un lugar destacado entre los avances labores de este convenio. Además de recoger el contrato indefinido adscrito a obra, previsto en la reforma laboral pactada por los agentes sociales, el convenio limita a un año el contrato temporal por circunstancias de la producción, que conlleva una indemnización al finalizar de un 7% sobre todos los conceptos salariales. También se regula el contrato fijo discontinuo, fijando la posibilidad de percibir una cuantía adicional, creando además una bolsa de empleo sectorial.

En materia de formación, el convenio enlaza la retribución con la duración de los contratos formativos para vincular de forma más efectiva la experiencia profesional con el nivel de estudios, posibilitando que los jóvenes puedan incorporarse al sector.

En materia de igualdad, se ha conseguido posibilitar el incremento de la presencia de la mujer en el sector al vincular la jubilación forzosa de un trabajador con la contratación de una mujer, facilitando de esta forma su acceso al sector. Con ello se avanza también en la regulación de la igualdad de oportunidades en el seno de las empresas.

Otra de las reivindicaciones históricas de UGT FICA que se recoge por fin en el articulado de este convenio lo constituyen las mejoras y actualizaciones introducidas en las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables en las obras de construcción para su adaptación a las nuevas formas de construcción, lo que va a mejorar sustancialmente las condiciones de trabajo del conjunto de las personas trabajadoras del sector.

El sector de la construcción es, además, el primero de ámbito estatal en incorporar y adaptar el Real Decreto-Ley 4/2023, por el que se regulan las condiciones de trabajo en situaciones derivadas de episodios de elevadas temperaturas, lo que supone un gran avance para la prevención de riesgos laborales de las personas trabajadoras en la construcción.

Precisamente en materia de prevención de riesgos laborales se ha avanzado también con la inclusión de nuevos contenidos formativos para la realización de determinados trabajos (arqueología, construcción industrializada, instalación de prefabricados…), lo que sin duda, va a redundar en una mayor seguridad en las obras.

Paralelamente, el convenio reconoce la especialización de los operadores de grúas torres y telescópicas, adaptando su especialidad a un nuevo nivel profesional superior.

En definitiva, y como asegura Mariano Hoya “hemos negociado y firmado un convenio histórico transformador, que avanza en derechos y sitúa al sector de la construcción en pleno siglo XXI como un sector novedoso, sostenible, con presente y sobre todo con futuro”.