El sindicato recuerda además que sigue habiendo margen para aumentar el SMI y los salarios de convenio
Los datos del IPC de noviembre, publicados hoy por el INE, sitúan la inflación anual en un 3,2%, 3 décimas menos respecto a octubre. Así, se va consolidando la moderación progresiva del ritmo de crecimiento de precios, a pesar del efecto escalón en los precios energéticos o el mantenimiento de las tensiones geopolíticas a nivel internacional.
Por su parte, la tasa subyacente, que recoge la inflación de componente más estructural, se reduce siete décimas respecto al mes anterior, alcanzando una variación anual del 4,5%. La brecha respecto a la tasa general se acorta a 1,3 puntos, la menor diferencia desde diciembre de 2022.
No obstante, la moderación del ritmo de crecimiento de los precios no implica que algunos productos no sigan encareciéndose y reflejando niveles inasumibles para el bolsillo de muchas familias trabajadoras. En este sentido, en noviembre los alimentos incrementaron su precio en un 9% anual, destacando la subida en algunos productos como el aceite de oliva (un 66,7%), el arroz (un 17,1%) y las legumbres y hortalizas (16,8%)
Por ello, UGT reclama la necesidad de abordar la prórroga de las medidas anticrisis o, en su caso, su sustitución por otras más eficientes y adaptadas al nuevo contexto socioeconómico. En este sentido, cabe recordar que la vigencia de descuentos en los servicios de transporte, la factura eléctrica y del gas o el precio de algunos productos alimenticios concluye a finales de año y que esto podría suponer nuevamente un incremento de las presiones inflacionistas, afectando en mayor proporción a hogares vulnerables.
El sindicato recuerda además que los últimos datos sobre evolución de los márgenes empresariales, que siguen en máximos históricos, ofrecen motivos razonables para seguir aumentando los salarios. Por ello, es imprescindible continuar en 2024 con la senda de incremento del salario mínimo interprofesional que sea coherente con la evolución de la economía y de los precios. Se trata de una política salarial que ya se ha demostrado efectiva para reducir la desigualdad, mejorar las condiciones de vida de la población más precarizada e impulsar un modelo productivo más eficiente.
El nuevo AENC permite mantener el poder de compra
UGT recalca que se debe mantener el ritmo de crecimiento de los salarios y, en ese sentido, incide en que el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) está generando los efectos deseados, ya que desde su aprobación se han firmado 825 convenios con un incremento salarial promedio del 4,1%, 5 décimas más que la tasa media de inflación (3,6%), frente a la pérdida de poder de compra de hasta 5,2 puntos registrada el año anterior.
Sin embargo, recuerda que la ganancia de poder adquisitivo debe ser una realidad en todos los sectores productivos, especialmente en aquellos que han registrado unos beneficios históricos derivados de la espiral inflacionista.