Tras años de recortes y campañas de privatización de la sanidad pública, no hay medios suficientes
En plena segunda ola, con un repunte de contagios de Covid en toda Europa, la Unión General de Trabajadores ha dedicado su consultorio monográfico semanal a analizar la situación de la sanidad y el Sistema Sanitario español en un espacio titulado “Sanidad, un debate urgente”.
El consultorio, emitido en la web a partir de las 12.00 horas, ha sido atendido por personas del ámbito sanitario como Gracia Álvarez, Responsable de Sanidad de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT); Inma Martín, Enfermera de la Comunidad de Madrid; Manuel López, Médico de familia del Campo de Gibraltar, en Cádiz y Manuela Laborda, técnica del Servicios de Estudios del sindicato, que ha sido la encargada de contestar a las dudas de la ciudadanía recibidas por UGT.
Tras ocho meses de pandemia, ¿Cuál es el estado de salud de la sanidad de nuestro país? ¿Se ha hecho algo durante el verano para mejorarlo? ¿Se han mejorado las condiciones de los trabajadores y trabajadoras del ámbito sanitario? ¿Se ha contratado personal? ¿Se ha preparado el sistema para lo que vendría en otoño? Estas son algunas de las cuestiones que se han analizado en el debate de hoy.
Invertir en profesionales
La Responsable de Sanidad de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT, Gracia Álvarez ha destacado que la crisis sanitaria ha puesto de manifiesto dónde teníamos más carencias gracias a los recortes progresivos en sanidad y la falta de inversión.
Gracia Álvarez ha explicado que no hay recursos humanos y materiales y existe un déficit muy marcado en atención primaria donde UGT reivindica destinar el 25% del total del presupuesto sanitario, aumentar la inversión en hospitales y llegar a la inversión media de la UE en sanidad, el 7,2%.
Además, Gracia ha denunciado el nivel de temporalidad permanente en el sector, una media del 35%, evidencia que, como mínimo, sino hay otras motivaciones, las plantillas están mal calculadas.
“Es muy importante tener la perspectiva de que esto es un problema de salud comunitaria y hay que tratar de adelantarse fortaleciendo la salud pública y la atención primaria, que es la que se encarga de los rastreos. Nuestros profesionales han dado la talla a pesar de los recortes y la falta de recursos pero hay que preguntarse cuáles van a ser las consecuencias de la focalización y no tener en cuenta que se sigue enfermando de otras cosas, sigue habiendo enfermos crónicos que deben atenderse, accidentes.. etc”.
Mejorar las condiciones laborales en el ámbito sanitario
Inma Martín, Enfermera del barrio de Carabanchel, en Madrid, ha contado su experiencia durante los meses de la pandemia, el cansancio, el miedo, la desmoralización y ha criticado la descoordinación y la falta de medios que ha impedido a los profesionales del sistema sanitario madrileño atender a los pacientes con normalidad.
Se ha preguntado si la poca preparación y el poco trabajo por parte de las administraciones se debe a “un no saber o un no querer”, algo que ha desconcertado mucho a los profesionales del ámbito sanitario que no entienden cómo la Administración en Madrid no se ha dejado aconsejar, en ningún momento, por los expertos, de hecho, “no se ha dado la importancia necesaria a la prevención, pero es fundamental para intentar llegar a una tercera oleada y que esto se convierta en algo cíclico. Debemos apoyar la prevención, la atención primaria, los rastreadores y fomentar la conciencia social. No se trata tanto de prohibir como de responsabilidad” ha destacado.
“Los aplausos nos daban una inyección de ánimo y de fuerza, pero nosotros no somos héroes, somos trabajadores y hacemos todo lo que podemos, pero no tenemos los recursos suficientes” ha finalizado.
Por su parte, Manuel Lopez, Médico de familia del Campo de Gibraltar, en Cádiz ha manifestado que al principio la sensación era de impotencia, miedo, falta de medios y de información clínica pero además de mucha inseguridad jurídica puesto que muchas de las decisiones finales les corresponden a los facultativos.
“Te dejan sólo, con toda la responsabilidad y te das cuenta de que, en una situación así el sistema hace aguas. Todo esto ha puesto de manifiesto las carencias que llevábamos denunciando desde hace años descapitalizando lo mejor que tenemos que son nuestros profesionales”.
“Además, en este momento, en plena segunda ola, podemos decir que nuestro sistema no se ha preparado como debería para afrontar esta situación. Sigue muriendo gente cada día. No podemos normalizar esta situación”. ha añadido.